Nairo Quintana (Movistar Team) llega a la montaña en séptimo lugar en la general, en el mismo tiempo que su principal rival, Chris Froome. Hoy en meta analizaba así el día y lo que llega el fin de semana: “Ha sido otro día de trabajo bien hecho por parte del equipo, excelente y sin fisuras. Hemos librado sin ningún problema esta última etapa llana, que junto con toda esta primera semana era el primer objetivo importante del Tour, y esperamos que llegue al fin la montaña. Mañana ya será una jornada dura con el Aspin, donde esperamos que la carretera empiece a poner a cada uno en su sitio. ¿Que si Froome atacará el primer día como otros años? Pienso que probablemente volverá a hacer lo mismo”.

Por su parte, José Luis Arrieta, director del equipo explicaba que: "Ayer tiramos porque pensábamos que debíamos hacerlo. Sky nos pidió ayuda porque ni ellos ni nosotros, por respeto a la carrera, queríamos que una escapada llegase a meta con 15 minutos. Conocíamos el terreno, no queríamos que la gente fuese cómoda y aprovechamos el terreno duro y el clima exigente para acelerar por ver si había gente ‘justa’. Estamos contentos, sin percances, con la gente entera y con ilusión. A partir de mañana empezamos Pirineos, con sábado y domingo como días más duros pero mañana con un ‘test’ importante. No descartamos nada en el Aspin. Froome puede volver a intentarlo como otros años. Si ellos lo prueban, intentaremos estar lo más cerca posible y jugar nuestras bazas cuando veamos el momento. El Tour se gana en París; allí no se sacan las diferencias, pero hay que mirar el futuro a tres semanas vista. Estamos contentos con el balance hasta ahora, pero hay que ir paso a paso”.

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