El líder de la Vuelta a España, Bradley Wiggins (Sky), quiere ser cauto pese a sus grandes sensaciones de hoy: “Es un día bueno para nosotros pero no quiero emocionarme. Quería estar entre los diez primeros hoy. Me siento bien pero me duele el cuerpo. Todo el mundo puede tener un mal día en una grande. No me he sorprendido porque Wiggins se haya quedado. Mañana puedo ser yo. No puedo ilusionarme por nada. En una carrera como esta, cualquiera puede estar un día arriba y al siguiente detrás”, ha comentado.

Por otro lado, el compañero del líder, Chris Froome, ha vuelto a ser un escudero de lujo del británico en La Farrapona, y es segundo en la clasificación general: “Hoy he obtenido una satisfacción enorme cuando me han dicho por la radio que varios de los favoritos se descolgaban. Wiggins ha estado increíble. Está en una condición muy buena. Para mi es el que merece la victoria en esta carrera. Nuestro objetivo hoy era obtener algo de tiempo respecto a los rivales antes del Angliru y lo hemos hecho”, ha comentado

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